[♬] Ningún golpe
me duele ya,
ni me daña,
ni me estremece,
ni me conmueve.
Nada queda ya en este mundo
más que este combate,
pues toda mi inquietud reside
en decidir dónde asestaré mi siguiente golpe
y hacia dónde dirigiré mi maltrecho escudo.
Como un autómata me reincorporo
y regreso a la batalla
mientras mi corazón palpita
sin acelerar su pulso,
sumido en un estado catatónico.
Ningún golpe
me atemoriza ya,
ni me domina,
ni me arrincona,
ni me acorrala.
Herida sobre herida recibí,
estigma sobre estigma,
dolor sobre dolor,
trauma sobre trauma,
caída sobre caída.
Veterano es mi espíritu,
impasible es mi gesto,
cadenciosa es mi respiración,
atezada es mi osamenta,
dura es mi piel bajo la coraza.
Ningún golpe
me conmociona ya,
ni me sorprende,
ni me alarma,
ni me anula.
Espada sobre el yunque soy,
carbón roído por las llamas,
hierro bajo el tonante martillo,
candente y maleable acero,
aliento de vulcanos y de cíclopes.
Golpe a golpe me fraguaron.
Golpe a golpe me forjaron.
golpe a golpe me pulieron.
metal sobre la herida soy,
aire y tierra, agua y fuego.
ni me daña,
ni me estremece,
ni me conmueve.
Nada queda ya en este mundo
más que este combate,
pues toda mi inquietud reside
en decidir dónde asestaré mi siguiente golpe
y hacia dónde dirigiré mi maltrecho escudo.
Como un autómata me reincorporo
y regreso a la batalla
mientras mi corazón palpita
sin acelerar su pulso,
sumido en un estado catatónico.
Ningún golpe
me atemoriza ya,
ni me domina,
ni me arrincona,
ni me acorrala.
Herida sobre herida recibí,
estigma sobre estigma,
dolor sobre dolor,
trauma sobre trauma,
caída sobre caída.
Veterano es mi espíritu,
impasible es mi gesto,
cadenciosa es mi respiración,
atezada es mi osamenta,
dura es mi piel bajo la coraza.
Ningún golpe
me conmociona ya,
ni me sorprende,
ni me alarma,
ni me anula.
Espada sobre el yunque soy,
carbón roído por las llamas,
hierro bajo el tonante martillo,
candente y maleable acero,
aliento de vulcanos y de cíclopes.
Golpe a golpe me fraguaron.
Golpe a golpe me forjaron.
golpe a golpe me pulieron.
metal sobre la herida soy,
aire y tierra, agua y fuego.
![]() |
Imagen creada con IA © |
Me gusta el poema, pero no me gusta lo que expresa. Denota demasiado dolor y yo soy de los que cree que no hemos venido a este mundo a sufrir.
ResponderEliminarAunque creo que es bueno expulsar ese daño, es bueno tirarlo para fuera. Si queda dentro te acabará reconcomiendo.
Es necesario echar fuera los demonios y que nunca puedan vencerte.
Cuídate.
Un saludo.
A veces escribimos cuando aún llevamos la herida de los sentimientos demasiado a flor de piel, nos delatamos casi como si fuésemos tránslúcidos.
ResponderEliminarAunque es un buen ejercicio para expulsar los demonios personales.
Salud.
La verdad es que estoy totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarPor un lado tampoco yo pienso que hemos venido a este mundo para sufrir. Por eso creo que el sufrimiento, incluso el más pequeño, me afecta aún más que a otras personas, como si fuese hipersensible a él...Si bien, no podemos elegir cuánto sufrimiento padeceremos en nuestra vida, pues eso es algo que queda en gran parte en manos del destino...
También creo que es bueno expulsar ese veneno antes de que se emponzoñe dentro, por eso siempre escribo cuando la herida aún está abierta. Por eso mi poesía es siempre tan sombría, tan visceral, tan agónica... Luego la herida restalla y yo recupero la salud suficiente para continuar mi andadura...
Llevo ya casi 30 años habitando este mundo y luchando contra él y contra mi propio destino con un único propósito: escribir... Pero para ese propósito, hay que ir por ahí sin coraza, pues las Musas no hablan con los soldados... Así que prefiero que me hieran las carnes antes que ajustarme la coraza...
En fin... Un beso, alma gemela
;-)
Hola!!!
ResponderEliminarHacía mucho tiempo que no pasaba por aquí,por distintas cosas que pasaron había perdido tu dirección, después le azar me llevó a reencontrarla.
Me ha encantado la música y estos versos, preciosos.
no sé si me recordarás, no importa.
Ha sido un gusto andar otra vez por tus rincones, espero que estés bien y te invito a visitarme.
un saludo desde Argentina,
Biblioteca de Cadiz
ResponderEliminarPoemas del Mentidero
De vez en cuando dí hola para saber que vives
Un saludo
Si es que ya lo dicen por ahí: Lo que no te mata te hace más fuerte...tu poéma es una clara muestra de ello...
ResponderEliminarSaludos
No se puede escribir tan bella y profundo poema sin que el sentimiento esté a flor de piel. Son los golpes los que nos enseñan las lecciones de la vida, los golpes los que nos impulsan una y otra vez a levantarnos y seguir. No importa que tan pesimista, triste, alegre o romántico sea un poema....lo importante es que nos provoque algo, que nos identifique con un pensamiento o sentimiento intimo. Auxi, logras, sin duda alguna, mover cada célula y molécula de nuestro cuerpo, haces que podamos sentir como la sangre fluye en nuestras venas y sobre todo reflejas con tus palabras lo que nosotros sentimos, pero que somos incapaces de describir y traspasar a un papel
ResponderEliminarCómo me han conmovido tus palabras. Es hermoso sentirse compartida. Pero llegar a las células y a las moléculas es más de lo que se puede pedir. Muchas gracias y un fuerte abrazo.
ResponderEliminar